Representantes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), nutricionistas y del Colegio Médico, así como consultores de la industria alimentaria, entre otros, expresaron su preocupación por el contenido del reglamento de la Ley 30021 –Ley de Promoción de la Alimentación Saludable- que actualmente elabora el Ministerio de Salud. Este no se adecúa a los parámetros técnicos que determinan el consumo de alimentos, especialmente los dirigidos a los niños, según afirmaron.
Las recomendaciones médicas, supervisadas por la OPS y la OMS (Organización Mundial de la Salud), están dirigidas, principalmente, a fijar y vigilar que alimentos envasados y la ‘comida chatarra’ contengan mínimos niveles de sodio, azúcar y grasas, que han sido considerados dañinos para la salud y causante de obesidad en los niños.
Señalaron que la propuesta “no guarda relación con la ley aprobada”. Los parámetros técnicos que se consignan el proyecto de reglamento de la ley son demasiado altos, duplican y triplican los niveles que han fijado organismos como la OPS y la OMS.
Los expertos, reunidos por una convocatoria del congresista Jaime Delgado (NGP), dijeron en la sesión de trabajo que los ajustes en el reglamento deben darse basados en las recomendaciones de los organismos mundiales. Debe haber armonía en todos los niveles para que puedan ser utilizados por todos los países, afirmaron.
Dijeron también que las especificaciones deben ser consideradas en cada producto y en lugar visible. Otro de los asistentes dijo que había “una falta de respeto a las normas. No se reglamenta lo que dice la ley y no pasa nada”, expresó.
También comentaron que en el reglamento no se dice cómo debe ser la alimentación saludable ni la publicidad que deben consignar los productos. Tampoco se ha dado a conocer quiénes integraron el comité sectorial que elaboró la propuesta. Opinaron que la población está en desventaja frente a la gran publicidad que reciben las gaseosas y los productos trans, y que lo adecuado es publicar un “semáforo nutricional” advirtiendo el peligro de su consumo.
Representantes de la OPS en el Perú comentaron, además, que el Perú mantiene aún un bajo consumo de alimentos saturados en grasas, pero la tendencia es, dijeron, a consumir productos de este tipo. Se trata de un tema urgente y la OMS estará atenta a ello, según señalaron.
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